sábado, 2 de mayo de 2015

Medio Ironman Peñíscola Abril 2015


La verdad que este año no me veía redactando ninguna crónica deportiva.

Está siendo el peor año en lesiones. Se me ha juntado a la vez una molestia en la rodilla (que sigo sin recuperar) y una crisis aguda de espalda.

Por suerte, he podido participar en el Medio Ironman de Peñíscola, aunque no haya hecho la carrera a pie.
 
 
 

Viernes 24 de abril de 2.015.

Partimos para Peñíscola 8 personas. Los inigualables Labaka brothers (Andoni e Igor), Mikel el “tortillas”, Asier la “bestia”, Arnaitz el “Hawaiano”, la pareja “donostiarrak” (Eneritz, que tiene el récord escribiendo what apps y “gemelos” Joseba) y el paquete “Pitu”.
 
Nos desplazamos en tres coches. Tengo la fortuna de conocer a los “donostiarrak” durante el trayecto. Sólo comentar que es su primer triatlón y ya van a hacer una media distancia. Nada, es un entreno para el objetivo que tienen, el Ironman de Vitoria. Ahí queda eso!

Después de 6 horas de viaje, llegamos a Peñíscola. Dormiremos en un chalet, situado en un alto donde se puede apreciar el Peñón con el famoso Castillo, una de las tres sedes Pontificias que ha habido hasta ahora.
 
 

Chalet de dos pisos, con 5 dormitorios, 4 cuartos de baño, 2 cocinas, piscina y un futbolín… Agradecer a Andoni Labaka por haberlo elegido. Hemos pasado una estancia muy agradable.
 
 

Uno de mis temores cuando voy en grupo a una prueba de estas es la distribución de las camas. Decidimos hacer un sorteo de las mismas, bueno, en el sorteo entramos todos menos la afortunada pareja que duerme en una super cama de matrimonio con las mejores vistas del Chalet… Pero bueno, no me puedo quejar porque Eneritz es la encargada del sorteo y me da otra cama de matrimonio en un cuarto individual.

Sábado 25.

Después de dormir como un pajarito, Arnaitz nos comenta que ha pasado una noche de perros. Ha devuelto varias veces y se encuentra muy mal. Decide quedarse en casa descansando para ver si el domingo puede competir.

Por la mañana, hacemos un pequeño entreno. Andamos en bici unos 30 kilómetros y nadamos unos 20 minutos. Los “donostiarrak” no nos pueden acompañar en la bici porque tienen que llevar el coche al taller. Pero eso no quita para que corran por Peñíscola unos minutos.

Nos acompaña en este entreno Xoan el “Conde”. Otro Ironman consagrado. Llamado el “Conde” porque ha preferido alojarse en un Hotel 5* situado a 2 minutos de los boxes. Creo, sinceramente, que se ha perdido lo mejor del viaje. La convivencia de unos deportistas compartiendo experiencias  y tener la oportunidad de conocerse mejor.
 

 
 

 






Tanto las cenas como las comidas las hemos hecho en el Chalet. Quien se ha ocupado, principalmente, de hacer las comidas, eran la “Bestia” e Igor Labaka, una máquina como triatleta y una gran persona. El resto, nos ocupábamos de poner la mesa y de fregar.





Después de comer, hemos ido a por los dorsales al Hotel 5*.
 
 

Más tarde a los boxes para dejar las bicis.
 
 

Después hemos ido al Peñón para dar una vuelta, ver el Castillo y tomarnos unas cervezas.



Mientras unos se quedaban de paseo otros (Andoni, Arnaitz y Yo), hemos vuelto al Hotel para escuchar una charla de Ciro Tobar sobre natación.

Ya en el Chalet, hemos dedicado un tiempo a los preparativos de la carrera. Comprobación de todo el equipo de la prueba, colocación de las pegatinas y, muy importante, la preparación de suplementos alimenticios, todos permitidos, de geles, barritas y bolsas con polvos que no sé muy buen qué eran…
 






 
 
 
 
 



Para la cena, además de la pasta correspondiente, Mikel prepara una tortilla tamaño “individual” de unos 10 huevos…
 
 
 

Después de unas cervezas y algo de vino, nos vamos a la cama para intentar dormir lo mejor posible.

Domingo 26, día D.

La prueba consiste en nadar 2.100 metros, rodar 90 kilómetros y correr 20 kilómetros.

Natación:
 
 

Este es mi punto fuerte pero, en este caso, no se me da muy bien.

Se sale en 3 grupos. Dos de unas 200 personas y el último de mujeres. Las salidas son cada minuto. Yo salgo en el segundo grupo.

Después de “correr” por el agua unos 100 metros empiezo a nadar. La prueba consiste en dar la vuelta al peñón.

Es verdad que paso a mucha gente pero no soy capaz de coger pies en todo el trayecto. 

Después de unos 33’ llego a los boxes. Como el chip no está asignado a mi dorsal y me olvido de dar al “Start” del pulsímetro no sé exactamente qué puesto y tiempo he hecho.

Decir que Andoni Labaka sale del agua el 7. Enhorabuena!!!
 
 

Carrera en bici:
 
 

Los primeros 15 kilómetros tienen una pequeña pendiente pero no muy dura. Luego hay que dar tres vueltas a un circuito de 20 kilómetros y finalmente volver por los mismos 15 kilómetros iniciales.

Se me hace bastante duro. Es bastante rompepiernas. No he podido entrenar mucho. Me pasa todo el mundo pero, aun y todo, llego a disfrutar del recorrido. La carretera está bastante bien y el paisaje es muy bonito.

Me entero más tarde que la “bestia” se ha caído en una curva muy cerrada y no muy bien señalizada. Es una pena porque estaba yendo al mismo ritmo de Igor. Y eso son palabras mayores. Se lo llevan hasta en ambulancia.

Foto de la “Bestia”.
 
 

Carrera a pie:
 
 

La prueba es bastante dura. Son 2 vueltas a un circuito, con subidas, de 10 kilómetros.

Como he comentado al principio, no llego a correr a pie pero tengo la fortuna de ver correr a mis compañeros y de animarles cada vez que pasan cerca de mí.








Tampoco Arnaitz puede acabar la prueba. En el kilómetro 1 se retira, no se encuentra con fuerzas, y eso que había llegado en bici el puesto 16. Una pena.

No puedo dejar de comentar un tema que me ha dejado marcado en este viaje. Parece mentira que Joseba pueda correr a muy buen ritmo con esos pedazos gemelos. Tienes mucho mérito!

Los Labaka Brothers quedan 20 y 21 en la general y Eneritz, séptima de las mujeres. Que se preparen en Vitoria.

De camino a casa paramos a comer en un Mcdonalds.
 
 

 

 
 





Después de un maravilloso viaje toca descansar…
 
 
 

Hasta pronto. Espero!